Los que integramos el CDHPN damos la bienvenida y agradecemos a PBI su decisión solidaria de abrir una oficina aquí en Chih. Su presencia y acompañamiento se suman a partir de hoy a nuestros esfuerzos cotidianos por lograr que los DD.HH sean respetados, protegidos y garantizados por el Estado Mexicano.
Agradecemos igualmente la presencia y el testimonio de las y los defensores aquí presentes. Gracias por su compromiso que siempre nos estimula, por la tenacidad en su lucha , por atreverse a denunciar a pesar de los riesgos de ser amenazados, criminalizados, descalificados, por seguir en su tarea y por no resignarse y mantener viva su hambre y sed de verdad y de justicia. Como organizaciones del norte de la Republica valoramos y damos también la bienvenida a las brigadas internacionales de paz.(PBI)
El lunes 23 de septiembre firmamos un convenio de acompañamiento entre PBI y Paso del norte.Es el comienzo de un proceso que paulatinamente ira abarcando a las organizaciones defensoras de los DD.HH. en los Estados de Coahuila y Chihuahua. Valoramos su compromiso de ayudar para que nuestro trabajo se desarrolle en un clima de seguridad, reconocimiento y legitimidad. Valoramos su apoyo para visibilizar y difundir nuestro trabajo de acompañamiento a víctimas de tortura y desaparición forzada y para dar a conocer las situaciones de riesgo que continuamente enfrentamos.
NACIMIENTO. UBICACIÓN.
Como centro de DD.HH nos ubicamos en Ciudad Juárez. Ciudad caracterizada por intensos flujos migratorios, el auge de la industria maquiladora, inmensos rezagos urbanos, y una compleja problemática social en la que se mezclan elementos económicos, sociales y culturales como el desarraigo, el trabajos masivo de mujeres, la desintegración familiar, el pandillerismo, el tráfico y consumo de drogas , la corrupción de las autoridades y niveles altísimos de impunidad.
Bajo este marco social de violencia e inseguridad y en el contexto de los feminicidios, paradójicamente el centro nace en el seno de un acto de tortura. El grito de dolor de una madre indignada y angustiada porque un grupo de militares había torturado a su hijo, fue el momento inspirador, al solidarizarnos en su denuncia pública, para que naciera el centro de DD.HH Paso del norte.
Desde la fundación del CDH Paso del Norte en el 2001, la violación a los DDHH en el estado de Chihuahua y sobre todo en Ciudad Juárez, es una constante. Les comparto dos o tres experiencias.
GUERRA AL NARCOTRAFICO. La etapa más dolorosa para el centro Paso del norte ha sido la etapa violenta que nos impuso el gobierno federal al declararle la guerra al narcotráfico a partir de enero del 2008. 4 años de un dolor sin límites. El signo más estremecedor y que nos habla de la profundidad del agravio es el número de sus crímenes.Homicidios dolosos relacionados con el crimen organizado, personas desaparecidas y el imparable goteo de feminicidios que no termina. Haciendo sumas estamos hablando de 10 mil muertes, más de 10 mil huérfanos, mas de 100 mil desplazados, 116 mil viviendas abandonadas, negocios cerrados y alrededor de 90 mil desempleados. Juárez llego a ser la ciudad más violenta del mundo.
Bajo este clima de terror e inseguridad como defensores y defensoras de derechos humanos nos sentimos impotentes ante la dimensión de la violencia criminal y la violencia del Estado. Durante estos años la ciudadanía denuncio día a día al ejército y a la policía federal de allanamientos ilegales, detenciones arbitrarias, extorsiones, tortura, desapariciones forzadas y ejecuciones extrajudiciales. La experiencia de Juárez es que a mayor presencia del ejército y de la policía federal, mayor violencia. De aquí se deriva nuestra oposición permanente a la militarización del país.
Ultimamente han disminuido los delitos de alto impacto. Pero la ciudadanía sigue siendo víctima del abuso y arbitrariedad de la policía municipal. Golpean, roban y detienen a inocentes, criminalizando sobretodo la pobreza. Las víctimas son los adictos, los jóvenes pobres, los desempleados, los miserables. El abuso y el autoritarismo del policía responden a una estrategia del poder político que pretende subordinar e inhibir la participación a través del miedo y del terror.
Ciudad Juárez sigue viviendo una crisis de seguridad humana, económica y social. La violencia puede resurgir en cualquier momento. Signo de ello es la masacre de 10 personas acaecida en días pasados en el Valle de Juárez. Es una más entre las 25 masacres que ha sufrido la ciudad.ES preocupante porque las causas inmediatas de la violencia siguen ahí: la presencia del crimen organizado, la corrupción de las autoridades, los abusos de los policías, los altísimos niveles de impunidad, la marginación urbana, el desempleo, la simulación democrática, etcétera.
LA TORTURA.
En los últimos dos años, en el centro hemos dado prioridad al acompañamiento y a la defensa de víctimas de tortura y desaparición forzada. Hemos registrado y documentado decenas de casos de tortura.El uso de la tortura en la ciudad, como en todo el país, sigue siendo una práctica común y sistemática de los policías ministeriales, municipales, federales y militares.
Manifestamos que frente a nuestras denuncias no vemos en el Estado mexicano voluntad política para cambiar las cosas.es el mismo Estado el que la práctica, la encubre, y la deja impune, violentando los derechos humanos y socavando la paz pública que debería proteger. Es preocupante el nivel de impunidad: según la PGR en 6 años solo se condenó a dos personas por este delito. Si falta la investigación, la sanción y la reparación del daño se incentiva a los torturadores a seguir cometiendo el delito. Quien la denuncie merece la condena. No es gratuita la construcción mediática del defensor de derechos humanos como un nuevo enemigo que obstaculiza la lucha contra el crimen organizado. Nos dicen que defendemos delincuentes. Mantener esta línea de trabajo nos lleva a confrontaciones constantes con las fuerzas de seguridad.
ALLANAMIENTO DEL CDHPN.
El día 5 de junio del 2011, varias patrullas de la policía federal irrumpen violentamente en el Centro de derechos humanos Paso del norte. Después de haber bloqueado las calles aledañas al Centro, varios policías destruyen a marrazos las chapas y las puertas de entrada y trasera del Centro. Rompen los vidrios, arrancan la alarma, entran y hurgan en todos los cuartos, gavetas, archiveros y escritorios. Se trata de un allanamiento ilegal, abusivo y arbitrario.
El contexto de este allanamiento fue la llegada a Cd. Juárez de la Caravana del Consuelo, organizada por el Movimiento por la paz con justicia y dignidad. participábamos activamente en su recepción y organización. Y además defendíamos varios casos de violaciones a los derechos humanos en los que los agresores habían sido policías federales. Unos días antes terminaba una audiencia en la que las abogadas del centro acusaron de tortura a varios policías federales.
Analizando el contexto interpretamos el allanamiento como una práctica represiva que pretendió inhibir y atemorizar a las y los defensores de derechos humanos del Centro.
La CNDH en la recomendación #9/2012 reconoce que con estas acciones, los defensores y defensoras de derechos humanos, ven obstaculizadas sus actividades y además las inhiben y reprimen y los colocan en riesgo dado el clima de violencia e inseguridad en que realizan su trabajo de defensa de los derechos humanos.
DEFENSORES Y DEFENSORAS.
Sabemos que desempeñamos nuestra labor de defensores de derechos humanos en un contexto adverso. La inseguridad y violencia del crimen organizado, los altos niveles de impunidad y complicidadque prevalecen en la procuración de justicia , son factores que intensifican los riesgos de los y las defensoras de los derechos humanos.Conocemos las historias de defensores y defensoras, de la ciudad y del Estado que han sido Hostigados, amenazados, calumniados, exiliados y asesinados.
Sin ignorar estos riesgos asumimos la conflictividad de nuestra misión como defensores de los derechos humanos. Libremente optamos por promover y defender la dignidad humana.
Y hoy, en medio de este estado de cosas tan violento, fragmentado y tan ultrajado en sus víctimas, celebramos la llegada a nuestro Estado de las brigadas internacionales de paz. Son una mirada y una voz internacional que apoyara para que el trabajo de defensores y defensoras sea respetado protegido y reconocido por el Estado y la sociedad. De nuevo bienvenidos y gracias por su acompañamiento.
Chihuahua, Chihuahua a 1 de octubre del 2013.